23.8.2022
El Gobierno cede y se comprometió a seguir pagando una deuda de subsidios, pero las empresas que amasan millones y no invierten en el servicio quieren más y toman medidas de fuerza.
Las cámaras empresarias del servicio de autotransporte de pasajeros ratificaron en la tarde de este martes que continuarán con el lock out que complica la vida de millones de personas en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Desde hace semanas, los colectivos circulan con servicios reducidos durante el día y no circulan en el horario nocturno.
De esta forma las patronales chantajean para exigir más subsidios y la suba de tarifas, mientras quienes tienen que viajar todos los días sufren largas esperas y complicaciones para ir desde sus casas al trabajo y viceversa.
Según denunció el Movimiento de Agrupaciones Clasistas (MAC), las líneas del AMBA recibieron más de 96 millones de pesos en 2021, lo que representaba casi el 78 % del total de los subsidios destinados al transporte público de pasajeros. A comienzos del 2022, el gobierno nacional aumentó un 40 % la asignación para el Fondo Compensador del autotransporte urbano y suburbano de pasajeros.
En medio de la enorme crisis social y económica que vivimos producto del acuerdo con el FMI, ya consiguieron un tarifazo que aplicó el Gobierno del 40 % a comienzos de agosto, que significó un ataque al bolsillo del pueblo trabajador que viaja en transporte público cotidianamente. Pero esto no les alcanza.
La decisión de las empresas de continuar con el lock out para exigir más subsidios y tarifas más altas se sostiene, pese al compromiso asumido este martes por el Ministerio de Transporte de continuar realizando los pagos semana a semana para reducir la deuda existente por subsidios. Como ya demostró desde que asumió el Frente de Todos, el Gobierno cede a cualquier exigencia de los empresarios y les permite hacer cualquier cosa con las tarifas, a pesar de que han ganado millones y jamás invirtieron un peso en el mejoramiento de los servicios.
La respuesta fue dada a conocer en la tarde de este martes tras la reunión celebrada en la sede de la cartera, en la que se intentó encontrar una salida al lockout patronal que desde el viernes pasado mantiene paralizado durante las noches el funcionamiento de 100 líneas de colectivos de un total de alrededor de 400 que circulan por el AMBA y que, durante el día, desde las 5, circulan con frecuencias reducidas.
Las cámaras empresarias del sector en el AMBA anunciaron que continuarán con la medida de fuerza en lo que resta de la jornada y la madrugada del miércoles, y que, este miércoles, en caso de recibir parte del pago adeudado por el Estado, de acuerdo a la promesa oficial, “estudiarán” los nuevos pasos que podrían dar para obtener una respuesta a su reclamo.
Como se ve, las medidas de fuerza de los poderosos son toleradas, mientras que cuando la clase trabajadora o las organizaciones sociales emprenden una acción para defender sus derechos, son demonizados por el Gobierno, la oposición de derecha y los principales medios de comunicación.
El Gobierno solo amenaza con multas a las empresas
Las autoridades del Ministerio de Transporte ratificaron que se aplicarán multas a las empresas que no cumplan con los servicios. El labrado de las actas de infracción se concretó durante el fin de semana, cuando 160 líneas llevaron adelante un cese total de los servicios nocturnos. La supervisión estuvo a cargo de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT). Fuentes de la CNRT precisaron que los controles se efectivizaron en los centros de trasbordo Retiro, Constitución, Pacífico (Plaza Italia) y Liniers, donde se labraron 51 actas de comprobación por incumplimiento de servicio. Esto no les hace ni “bu” a los empresarios que saben que con un Gobierno que cede consiguen lo que quieren al final de la puja, a pesar de las amenazas oficiales.
La CNRT considera que, si los servicios del transporte urbano no se prestan durante 5 días consecutivos o 10 días alternados en el término de un año, el organismo estará en condiciones de considerar que el operador desestimó la continuidad del servicio, por lo que sería pasible de perder la concesión del mismo.
Esta es la tercera semana en la que el servicio de colectivos del área Metropolitana de Buenos Aires se ve afectado. El monto que reclaman los empresarios, de acuerdo a lo manifestado oportunamente, ronda los 17 mil millones de pesos.
En ese marco, este martes se realizó una transferencia que debe estar acreditada este miércoles con parte de la deuda.
“El Ministerio continúa con el compromiso asumido de continuar abonando la deuda y seguirá manteniendo el diálogo con las Cámaras Empresarias”, a las que le piden que “levanten la medida y normalicen los servicios en pos de los pasajeros”, dijeron a Télam fuentes de la cartera nacional.
No obstante, los transportistas anticiparon que, pese a que la reunión se desarrolló en un marco “cordial”, recién cuando mañana estén acreditados los fondos, “analizarán los pasos a seguir” y ratificaron que “por hoy” se mantiene el mismo esquema de los días anteriores, es decir que no habrá servicio nocturno entre las 22 y las 5 de este miércoles y durante el resto del día los servicios circularán reducidos, con el cronograma de un día sábado.
La reunión
La reunión de este martes, que tuvo como sede al Ministerio de Transporte, comenzó poco después de las 11.30, encabezada por el ministro Alexis Guerrera y con la participación del secretario de Transporte, Diego Giuliano; del secretario de Articulación Interjurisdiccional, Marcos Farina; el subsecretario de Política Económica y Financiera, Carlos Vittor; el director ejecutivo de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte (CNRT), José Arteaga. y el ministro de Transporte bonaerense, Jorge D’Onofrio.
En tanto, estuvieron representantes de la Cámara del Transporte de la Provincia de Buenos Aires (Ctpba), la Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP), la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (Cetuba), la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta), y la Cámara de Empresarios Unidos del Transporte Urbano de Pasajeros de Buenos Aires (Ceutpba).
Tras poco más de dos horas de deliberaciones, los empresarios se retiraron de la sede de la calle Hipólito Yrigoyen sin efectuar declaraciones y anticipando que trasladarían a las empresas lo manifestado por las autoridades del Ministerio.
Posteriormente anunciaron que la medida se mantendría.