Movistar Arena pretende que sus trabajadores asuman la responsabilidad de morir por Covid-19
11.8.2020
Por Patricio Abalos Testoni
La empresa que administra el Microestadio ubicado en Villa Crespo quiere que los trabajadores firmen un “consentimiento” donde renuncien a sus derechos, eximan de responsabilidad a la empresa e incluso la indemnicen en caso de contagios y hasta el fallecimiento por Covid-19.
Los trabajadores del Movistar Arena denunciaron que la empresa que maneja el Microestadio los obliga a firmar un “consentimiento” para que puedan volver a trabajar. En el mismo la empresa se desliga de toda responsabilidad de accidentes o contagios de Covid-19 y niega cualquier reclamo por las condiciones de seguridad e higiene. Para peor pretende que sean los trabajadores los que indemnicen a la empresa si hay contagios o fallecimientos por este virus.
Desde el Sindicato Argentino de Técnicos Escénicos (SATE) en un comunicado rechazaron este abuso por parte de la empresa BA Movistar Arena que pertenece a la empresa Buenos Aires Arena S.A. del grupo La Nación y la Multinacional AEG Worldwide.
El sueño empresarial de volver a una situación de semi esclavitud
La empresa que administra el estadio ubicado en la calle Humbolt 486/540 pone como condición para que vuelvan a trabajar que se firme este consentimiento. Hay que tener en cuenta que los trabajadores del espectáculo son de los más golpeados con la pandemia, ya que es un sector donde abunda la precarización y las contrataciones como monotributistas.
Por empezar a los trabajadores se los caracteriza como prestadores de servicios (algo común en la precarización) pero además los obligan a firmar que: “al ingresar al Miniestadio Cubierto acepto asumir voluntariamente cualquier y todo riesgo relacionado de cualquier manera con la exposición a COVID-19, lo que incluye enfermedades, lesiones o la muerte que yo u otros sufran”.
También se les hace firmar que cuentan con todos los equipos de protección establecidos por los protocolos del Covid-19, cuando ni siquiera saben con qué van a contar. En consecuencia cuando vuelvan a las tareas si no están todos los elementos de protección personal y las condiciones de seguridad e higiene garantizadas, no van a poder exigir nada. Incluso si se contagian no van a poder tomarse las licencias necesarias o hacer los reclamos correspondientes en un vínculo laboral. Esta condición presiona al trabajador a continuar yendo aun si está contagiado para mantener el trabajo.
Pero no conformes con todo esto, en otro punto directamente el documento expresa: “Eximo, me comprometo a no demandar, libero y exonero a Movistar Arena, y sus respectivas compañías afiliadas o relacionadas; y todos los directores, empleados y accionistas de cada una de las entidades anteriores, de forma permanente, de cualquier responsabilidad, reclamo, acción, daño, costo o gasto de cualquier naturaleza que se relacione con la exposición al COVID-19 y a cualquier otra enfermedad transmisible o infecciosa durante mis visitas al Miniestadio Cubierto, o que surjan en relación con esta”.
Y por si todo esto fuera poco en el punto 7 se afirma: “En mi propio nombre, acepto indemnizar y eximir de toda responsabilidad a cada una de las Partes Eximidas por cualquier reclamo que realice o inicie cualquier persona, lo que me incluye a mí y a cualquier tercero, que se relacione con mis visitas al Miniestadio Cubierto, o que surja en relación con ello, y que se deriven de cualquiera de los Riesgos, o que de otro modo se relacionen con la exposición al COVID-19”.
Es decir que los trabajadores no pueden exigir los elementos de protección ni las condiciones de seguridad e higiene; no pueden tomarse las licencias necesarias en casos de Covid-19 (u otra enfermedad); no pueden reclamar si se enferman e incluso, hasta en caso de fallecimientos, las familias no pueden exigir indemnización. Encima como trabajador, según este documento, deben indemnizar a la empresa en caso de que haya contagios por coronavirus. Solo le falta que se haga firmar que la vida del trabajador pasaba a ser propiedad de la empresa, para volver a la época de la esclavitud.
Movistar Arena, un negocio redondo donde nunca se pierde
El Microestadio Movistar Arena ubicado en la calle Humbolt 486/580 que se construyó hace dos años viene siendo denunciado por los vecinos de Villa Crespo ya que cambió la fisonomía de la zona, impactando gravemente en las condiciones de vida. Como relataba un vecino cada vez que hay un show las paredes tiemblan, el ruido no los deja descansar y el caos de tránsito los obliga a permanecer encerrados
Los vecinos no entienden como consiguieron permiso para construir un estadio de 25.000 metros cuadrados en el medio de un barrio residencial. No solo eso se denuncia, ya que se construyó en tierras públicas cedidas por la Legislatura porteña al Club Atlanta que a su vez lo cedió en comodato al diario La Nación, una de las empresas que administran el estadio. A su vez el Gobierno porteño lo exime de pagar impuestos de ABL por cuarenta años.
Además la legislatura aprobó un proyecto de rezonificación del área, lo que permitirá privatizar las zonas aledañas al megaestadio y todo el bajo viaducto generando otro gigantesco negocio inmobiliario que arruinará para siempre la identidad de Villa Crespo.
El espectáculo sobre los hombros de trabajadores precarizados
Los trabajadores de este sector vienen sin trabajar desde antes de la cuarentena. Desde los técnicos hasta los artistas vienen denunciando que se encuentran en una situación alarmante, ya que al ser contratados constantemente para espectáculos específicos, al no brindarse los mismos no tienen ningún ingreso.
La gran mayoría son trabajadores conocidos como freelance que emiten facturas a empresas que realizan la técnica y producción de este rubro. Aun cuando están trabajando para la misma empresa durante años para cobrar deben hacerse monotributistas ocultando la relación de dependencia.
Justamente los técnicos son los invisibles de un espectáculo. Son los que arman los escenarios, los que trasladan los materiales, los que montan las luminarias y el sonido. La gran mayoría con años de experiencia. Mientras que las empresas son las que se vuelven millonarias.
Actualmente con protocolos convalidados por el Gobierno de la Ciudad Movistar Arena se prepara para funciones infantiles que se van a lanzar por streeming. Sin embargo si se firma este consentimiento puede afectar a los espectáculos cuando vuelvan a ser presenciales. Por ende con este tipo de “consentimiento firmado” no solo se pone en riesgo la vida del trabajador sino también al futuro público que asista a los shows.