21.09.2011
Delegados y trabajadores del Teatro Colón, diputados, dirigentes políticos y sociales de la Ciudad reiteraron, en la Legislatura porteña, el repudio al despido de empleados del coliseo, en su mayoría de la junta interna de la Asociación de Trabajadores del Estado. Máximo Parpagnoli señaló a ACTA que “esto es parte del lenguaje mafioso de Macri, que anticipa nuevas persecuciones”.
“La cultura es un área inmanejable para el gobierno porteño, no tiene política o en todo caso su única política es la represión”, dijo Parpagnoli. Defendemos un modelo de teatro de producción propia, pero también nuestro derecho a organizarnos como trabajadores”.
Enfatizó que hacia cuatro meses que el Colón funcionaba normalmente, cuando Macri envalentonado por el triunfo electoral despidió a los delegados de ATE y además, adelantó “acaba de reactivar sumarios contra otros compañeros, pese a que se había comprometido a no hacerlo”.
Parpagnoli señaló que el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri y el director del Teatro, Pedro Pablo García Caffi, "están queriendo sentar un precedente que, de tener éxito, será un ataque contra todas las organizaciones sindicales del país, un ataque al corazón mismo de los trabajadores".
Ya hay un fallo de la justicia ordenando la reincorporación del delegado Carlos Fernández. Ellos no lo acatan. Habrá otros fallos iguales. Lo que hay que preguntarse es si Macri se ríe de la Justicia, de los gremios, y hace estas barbaridades, ¿que va a pasar con los trabajadores que no tienen ninguna protección?”.
Hace casi un mes, el Gobierno porteño cesanteó a ocho trabajadores del Teatro, de los cuales siete son delegados: Piazza, Parpagnoli, Susana Benítez, Carlos Flores, Pastor Mora, Ricardo Ochoa, Patricia Pérez y a Carlos Fernández.
Hace dos semanas, una jueza en lo laboral ordenó a las autoridades del Colón reconocer a Fernández como delegado elegido por sus compañeros, respetarle sus fueros sindicales y reintegrarlo al Máximo Coliseo.
En la conferencia estuvieron presentes los diputados Fabio Basteiro y Laura García Tuñón, y dirigentes de varios partidos políticos y organizaciones sociales.
Los trabajadores denunciaron que se intenta cambiar el modelo de teatro sin respetar lo que las normativas vigentes exigen, excluyendo de esa discusión a los trabajadores, “cosa que esta contemplada en la ley de autarquía, la 471 y la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires, esto se podría haber evitado. Ellos optaron por el despido, el miedo la confrontación con los trabajadores”.
Macri se equivoca cuando cree que lo votaron para despedir trabajadores, y mantener al Colón en un conflicto permanente, señaló Parpagnoli.