Los monstruos que resucitan.
24.9.2009
El 21 y 22 de setiembre pasados se realizó el Congreso Internacional de UnoAmérica en el Club del Progreso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
UnoAmérica es una fundación de origen venezolano presidida por Alejandro Peña Esclusa que, cual cruzado medieval, se encarniza contra los presidentes que integran el Foro de San Pablo.
La ultramontana UnoAmérica reivindica las dictaduras militares que azotaron Latinoamérica durante los años setenta. Defiende a los genocidas argentinos renegando de “la persecución contra quienes combatieron al terrorismo marxista, hoy presos políticos, aplicando de manera retroactiva decisiones judiciales ilegítimas”.
Durante este Congreso Peña Esclusa presentó su libro “El plan del Foro de Sao Paulo para destruir las Fuerzas Armadas”. Entre otras cosas Peña Esclusa escribe que “hemos decidido reactivar la organización que nos reúne… y asumir la condición de voceros y de interlocutores del sentir castrense…”.
Además hace un llamado para que la población latinoamericana se sume a la cruzada en defensa del ultimo bastión de la democracia y la libertad: “Nuestras gloriosas Fuerzas Armadas de América Latina” y agrega que cuando la democracia está en peligro, cuando las libertades ya casi no existen, y cuando la patria misma está a punto de desaparecer, los hombres de las Fuerzas Armadas están en la obligación de levantar su voz y de hacer respetar la Constitución”
En la convocatoria al reciente congreso decían de los presidentes de UNASUR que integran el Foro de Sao Paulo que ellos, “luego de varios años gobernando, no han solucionado los problemas de la región; por el contrario, los han agravado, debido a su errónea cosmovisión, que divide y polariza la sociedad”.
Agregaban que la “inseguridad jurídica de Argentina”, no sólo se manifiesta en los juicios a los ex represores sino que “afecta a todos los sectores de la vida nacional: la educación, la salud, la seguridad pública, la producción, el trabajo y las libertades individuales.
“¿Cuáles son los grandes cambios que se avecinan? ¿Qué futuro le espera al Socialismo del Siglo XXI? ¿De dónde surgirán los nuevos líderes que gobernarán nuestras naciones? ¿Cómo hacer de nuestro continente un emporio de riqueza?”, fueron parte de las preguntas que dispararon el debate de estas mentes diabólicas durante el congreso.
Demás esta decir que Unoamerica apoya el golpe de Estado en Honduras. Su sede en nuestro país la integran ex militares y ultra católicos. Como monstruos que resucitan del pasado estas fundaciones apelan a las palabras democracia y libertad, cuando operan de modo totalmente contrario al significado de esos conceptos. Buscan legitimar su accionar fascista detrás de una máscara que es preciso hacer caer.